Aterrizar en el patio. (Lab.S nº2)
Laboratorio comunitario de pintura mural.
"Aterrizar en el patio" surge de una complicidad entre La Casa Nómada en colaboración con Caritas Barcelona. Coincidimos en la intención de llevar a cabo un laboratorio artístico comunitario, orientando esfuerzos para obtener como resultado final la creación de un mural de 2 metros de altura y 26 metros de extensión. Entre los objetivos propuestos, buscamos conectar de manera significativa experiencias comunes entre las personas que hacen vida en los diferentes espacios y grupos de trabajo que conforman a la institución receptora.
A lo largo de varias fases, planificamos y ejecutamos actividades docentes, también impulsamos jornadas de trabajo con voluntarios, promoviendo el fortalecimiento de lazos comunitarios a la vez que exploramos el impacto transformador y relacional del arte como fuerza dinamizadora del entorno local.
Cumplir con todas las etapas planificadas para esta aventura nos tomó un año entero, considerando, principalmente, nuestro interés por sostener el estimulo y la integración de sus participantes, siempre ponderando en cada una de las fases las bondades del proceso colaborativo, mientras creamos espacios de reflexión en torno al poder e importancia del arte cómo vehículo de transformación para el sujeto, y por lo tanto, como herramienta indispensable para transformar el espacio social.
La fase 1 fue dedicada al proceso de aterrizaje de ideas, planificación general y acuerdos del plan de acción. En esta etapa inicial, La Casa Nómada representada por el artista visual Paul Parrella y por la otra parte, Javier Rodríguez, como director del Espai Polivalent de Roquetas dependencia de Caritas, en la ciudad de Barcelona, establecieron contacto con el fin de idear una actividad comunitaria en clave de laboratorio artístico. Juntos, acordaron la idea de ejecutar un mural que involucraría en todas sus etapas a diferentes actores de la comunidad. Fue definido un plan de acción que abarcaría cerca un año de actividades puntuales, dividiendo estas actividades entre espacios docentes y jornadas de trabajo comunitario.
La fase 2, fue para el diseño y planificación. Durante esta fase, celebramos reuniones con todos los involucrados para coordinar las acciones del proyecto y fueron acordadas las actividades específicas a desarrollar a lo largo del año. En este punto, nuestra meta era involucrar a la mayor parte de agentes profesionales que conforman el espai polivalent, todos integrados en el objetivo de orientar las actividades en indagar los temas relevantes para la comunidad. Se diseñó una cuidadosa programación que involucraba sesiones educativas, reflexiones y actividades diversas.
La fase 3 inició con las labores comunitarias de voluntariado, enfocadas en la optimización del espacio de trabajo. Como estado inicial, la pared, presentaba una irregularidad de superficie. Con la ayuda de voluntarios, nos enfocamos en rellenar con cemento las juntas de unión que separaban las tablillas de arcilla a lo largo de los 26 metros de pared a intervenir. Esta tarea no solo mejoró el espacio de trabajo, sino que también simbolizó la unión y compromiso de la comunidad en torno al proyecto.
La fase 4 fue para el imprimar con pintura de fondo la pared. Tras los meses de invierno, convocamos nuevamente a voluntarios para pintar la pared de blanco y dejarla lista para la intervención artística. Este acto preparatorio fue en sí mismo, descrito por las personas como un símbolo de integración, renovación y apertura hacia nuevas posibilidades creativas.
La fase 5 estuvo dedicada a las actividades docentes y generación de experiencias. Con la superficie lista para ser intervenida, dimos inicio a las actividades docentes con los grupos de jóvenes del Millac, así como con el grupo encargado de las actividades de refuerzo. Cada grupo generó una serie de experiencias en las que los niños reflexionaron sobre temas como el juego y el espai polivalent como lugar divertimento. Estas sesiones fueron fundamentales para establecer un diálogo creativo y fomentar la expresión de las inquietudes de cada uno los participantes.
La fase 6 estuvo dedicada a la construcción de la identidad gráfica. El artista representante de La Casa Nómada, Paul Parrella, se sumergió en los trabajos de los niños para establecer la identidad gráfica del mural. Mediante la selección de elementos significativos, pudo construir una narrativa que incluyera en la imagen la condición migratoria presente en muchos de los participantes. Esta fase aseguró la representatividad y la conexión emocional con la comunidad. El proceso y resultado de este trabajo fue expuesto en un área del Espai Polivalent con la finalidad de incentivar un diálogo abierto y escuchar así opiniones y sugerencias previo al proceso de pintura.
La fase 7 inició la etapa final del proyecto. La Jornada de pintura y culminación del mural. Esta etapa final consistió en una jornada de dos días. En el primer día, el artista Paul Parrella plasmó en la pared el boceto del mural. En el segundo día, se llevó a cabo una jornada de trabajo comunitario y colaborativo, en la que participaron alrededor de 25 personas adultas y varios niños. Cada uno contribuyó a la realización del mural, uniendo esfuerzos, trabajando de la mano para completar esta obra colectiva.
El proyecto "Aterrizar en el patio" nos ha permitido reflexionar sobre la relevancia del arte en los procesos de transformación comunitaria. A través de la imagen, las personas vulnerables han encontrado una voz para manifestar sus inquietudes y sueños. Además, estas actividades alimentaron el sentido de pertenencia y empoderamiento entre los participantes, fortaleciendo los lazos comunitarios y fomentando el sentimiento de inclusión.
"Aterrizar en el patio" ha sido un valioso laboratorio creativo en el que hemos podido experimentar con el arte como herramienta de cambio social. Nos enorgullece haber establecido alianzas estratégicas con Caritas Barcelona y otros actores comunitarios, y nos motiva seguir desarrollando proyectos similares en el futuro. La Casa Nómada reafirma su compromiso de utilizar el arte como una poderosa herramienta, un vehículo sensible que genera espacios de diálogo, reflexión y crecimiento para todos los involucrados.
A través de las distintas fases del proyecto, hemos logrado llevar a cabo un laboratorio artístico colaborativo que ha dejado una huella duradera en la comunidad. El mural representa no solo la migración y la importancia de encontrar un lugar seguro, sino también la fuerza del arte para unir a las personas y generar cambios positivos en la sociedad.
Las imágenes y videos que presentamos al público documentan parte importante de toda la experiencia, desde la planificación hasta la ejecución del mural, evidenciando el proceso de creación y la colaboración colectiva que lo hizo posible. Una experiencia enriquecedora y significativa para todos los involucrados.
"Aterrizar en el patio" es el primer laboratorio comunitario desarrollado por La Casa Nómada en España, nos alegra haber tenido al oportunidad de establecer alianza con una institución reconocida y de amplia trayectoria como Caritas, que depositó confianza en La Casa Nómada para diseñar, gestionar y ejecutar este proyecto.
Agradecemos y celebramos cada minuto de la experiencia.
Nota: Al abrir una imagen pueden recorrer el resto en forma de diapositivas.